A pesar de haber sido vista con una vía intravenosa horas antes del evento, Shakira demostró su profesionalismo y amor por su público con una actuación vibrante y llena de energía. Sus hijos, Milan y Sacha, llegaron a Perú el fin de semana para acompañarla en este significativo momento de su gira. Se les vio atentos y preocupados por su bienestar, cuidando de ella tras su salida del hospital y mostrando un tierno gesto justo minutos antes de que comenzara el show.